domingo, 15 de noviembre de 2015

#Flipped_INTEF, tarea final

Soy un adicto a la formación, debo reconocerlo. Me encanta aprender y me encanta compartir y, desde que descubrí los cursos de INTEF, he participado en todas las ediciones. Una de las cosas interesantes de participar en estos cursos es que, por un momento, vuelves a convertirte en alumno y experimentas en tus propias carnes las dudas y zozobras que nuestro alumnado experimenta cada día; te haces consciente de la necesidad de concretar, de dar instrucciones precisas, de organizar los objetivos de aprendizaje, los contenidos y la secuenciación con los que se presentan.


Este curso que termina me deja un sabor agridulce. Por un lado he descubierto algunas aplicaciones que me gustan y que, con toda seguridad, utilizaré habitualmente en mis clases. Por otro, me ha parecido un curso sin una clara orientación, en el que hemos tratado muchos temas interesantes -hemos hablado de blended learning, de la taxonomía de Bloom; de rúbricas, aplicaciones y de Pinterest; de ABP (aprendizaje basado en proyectos) y de AFL (assessment for learning); - y en el que, con la excepción de la primera unidad, el concepto de "flipped classroom" aparecía, de vez en cuando, de forma un tanto tangencial.

Y digo todo esto porque, en mi opinión, esta falta de orientación se ha hecho muy evidente en el taller  titulado "Tu primer proyecto Flipped Classroom" que se plantea como tarea final del curso. En esta imagen puedes ver su enunciado:


En primer lugar, me resulta curioso y un tanto incongruente que, a lo largo del curso, hayamos trabajado sobre el "artefacto" (producto a elaborar), la concreción del proceso y la evaluación por rúbricas para que luego, a la hora de la verdad, el trabajo final -es decir, el artefacto que, como alumnos, hemos elaborado para el curso- y su evaluación no tengan en cuenta los factores que hemos estado trabajando.

Entiendo que no se nos ofrezcan modelos a seguir en relación con el "documento" a presentar, que tengamos que desarrollar nuestra creatividad a la hora de desarrollar el producto final, que cada uno sea libre de elaborarlo en el formato que quiera (siempre que sea un pdf) pero no que las pautas no sean "claras y precisas".

Y digo esto porque me da la impresión de que decir que la presentación debe ser "atractiva, clara y precisa" no es una información suficientemente concreta (especialmente cuando, además, en ningún criterio de evaluación del taller se nos va a preguntar si, a nuestra opinión de evaluadores del trabajo de los compañeros y compañeras, su trabajo es "atractivo, claro y preciso") [únicamente en la primera pregunta se añade "en un formato que facilite su lectura"]

Debo, pues, señalar que, como alumno, y a pesar del apoyo y las indicaciones de mi tutor, me he sentido bastante desorientado ante la tarea y también ante las correcciones del trabajo de mis compañeras. Pero debo también reconocer que esta situación me ha ayudado a reflexionar sobre mi propia práctica docente y las instrucciones que doy a mi alumnado.

He tenido que evaluar tres proyectos y son completamente diferentes -y, por otro lado, completamente diferentes al mío-. Sí tienen algo en común, todos ellos implican un proyecto y la elaboración de un "artefacto" por parte del alumnado. Todos ellos son buenos ejemplos de la metodología ABP y de la integración de la competencia digital en la práctica diaria, pero, ¿y el concepto "flipped classroom"?, ¿es suficiente con el hecho de que el alumnado tenga que, antes de incorporarse al aula, haber visualizado un vídeo sobre el tema (esté o no enriquecido con enlaces, preguntas o comentarios)?

Es posible que el concepto "flipped classroom" no dé más de sí; es posible que no tenga sentido sin incorporarlo a otras metodologías... El tema me interesa así que seguiré profundizando (y compartiendo)

2 comentarios:

  1. Hola Fran, estoy totalmente de acuerdo contigo en cuanto a que esta tarea no se ajusta a la metodología Flipped Classroom a mi entender. No soy ninguna experta en el tema, es cierto, pero esta tarea no se diferencia en nada de una tarea para trabajar las competencias clave o un pequeño proyecto para practicar el ABP, lo que parece mostrar que queremos estar al último grito en metodologías innovadoras pero no lo tenemos del todo claro.. con llamarlo FLipped Classroom no basta..Este planteamiento de tarea también podría ser un "trabajo de los de toda la vida" pero presentando el trabajo con una herramienta digital en vez de presentarlo en un formato tradicional. Yo tampoco entiendo dónde está la "clase del revés" en esta propuesta de trabajo...
    Un saludo!

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    1. Gracias, María Jesús, me alegra saber que compartimos la misma opinión.
      Saludos desde Gijón.

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